Beneficios de la huerta orgánica
¿En qué consiste el proyecto?
Una excelente opción para aprovechar los espacios verdes en nuestros jardines es la realización de una huerta orgánica, además de crear el beneficio de obtener cultivos de forma más saludable y controlada, también nos ayuda con el ahorro de gastos dentro del hogar y disminuimos el impacto de contaminación ambiental, ya que generamos vegetales sólo para nuestro consumo, los residuos son orgánicos y pueden utilizarse de vuelta como abono. Como parte de nuestros proyectos de concientización sobre sustentabilidad, dentro de la empresa hemos formado una comisión, en la cual enseñamos a los empleados como llevar a cabo su propia huerta en casa.
Ellos estarán a cargo de la realización y el cuidado de la huerta, aprenderán todo lo necesario para asegurar un buen crecimiento del cultivo y la preparación del terreno; la idea principal es que luego, los participantes deberán transmitir el conocimiento adquirido dentro de su familia y su comunidad.
¿Cómo empezar el proyecto?
El primer paso del proyecto es, analizar y preparar el terreno, se deberá remover todo el pasto que sea necesario, humedecer el suelo para retirar algunas piedras que dificulten el crecimiento de las semillas. A esta etapa inicial se lo conoce como “Preparación del tablón” generalmente suele tener medidas de un metro de ancho por cuatro de largo. Este paso inicial sirve como laboratorio, para ir analizando cuánta agua necesitas, de qué manera van germinando las semillas, e inclusive la influencia de la luz solar.
Puedes utilizar parte del suelo que removiste, algunas piedras y maderas como cerco, para tener bien definido el área del tablón, y evitar que se escurra la arena y el abono de la zona de plantación.
Una vez realizado esos pasos, es hora de agarrar algunas herramientas extras y empezar a realizar surcos o canales de manera transversal, dentro del terreno delimitado para el tablón, en estos canales irán las semillas que elegiste para tu huerta; ten en cuenta que algunas hortalizas tienen raíces grandes, como son los zapallos, zanahorias, remolachas, etc. Así que debes analizar bien las semillas y darle cierto espacio para que puedan aprovechar cada una los nutrientes del terreno.
Una buena ayuda puede ser la utilización de fertilizantes, esto asegurará que quites el máximo provecho a tu siembra. En el momento que vayas colocando las semillas en los surcos, puedes ir mezclándolas con los fertilizantes, de forma equitativa y sin abusar mucho.
Cuando se haya realizado todos los procesos anteriores sólo resta, colocar de vuelta la arena en cada uno de los surcos o canales, ir tapando las semillas, sin hacer mucha presión sobre ellas. Regarlas diariamente y mantenerlas en observación.
Esta es la primera fase de la huerta orgánica realizada dentro de los predios de la empresa BDA, en otra entrega estaremos comentando de qué forma fue avanzando todo el trabajo realizado, y el momento del trasplante final de las plantas a la huerta definitiva.